El coliflor está en el rincón de las verduras que mucha gente no quiere, por el sabor que desprende cuando se hierve y por la flatulencia que provoca. Ambas tienen remedio y deberíamos resolverlo, pues es fuente, como otras brásicas (repollo, repollitas de bruselas y brócoli), de al menos dos compuestos de importancia en la prevención del cáncer: DIM (diindolilmetano) y sulforafano. En este caso, las razones de salud son de mucho peso.
Ingredientes:
- 1 coliflor
- aceite de oliva
- cilantro
- yerbabuena
- limón
- mostaza
- sal marina
- pimienta
Preparación:
Hornea una coliflor en láminas de 1 cm de grueso; rocíalas con aceite de oliva, sal y pimienta y si quieres alguna hierba. Hornea al calor alto unos 10-15 minutos hasta que tengan buen color pero todavía estén crujientes.
Sirve con una vinagreta de hierbas frescas (cilantro y hierbabuena licuado con limón, mostaza sin azúcar y aceite de oliva)